Por: Mairyn Arteaga Díaz
Como cada 24 de diciembre, Remedios despertará este año envuelto en una atmósfera de fiesta, más que eso, de parrandas; máxime cuando preceden el aniversario 500 de la fundación de la octava villa.
Declaradas en 2013 como Patrimonio Cultural de la Nación cubana, las celebraciones tendrán en esta ocasión un fuerte contenido asiático; de este modo, la carroza del barrio del Carmen representará las tradiciones japonesas y la de San Salvador, una historia de Tailandia.
Según Juan Carlos Hernández, especialista del Museo de las Parrandas, las especificidades de las iniciativas se mantienen en secreto producto a la competencia.
Sin embargo, acotó que ya se conocen los motivos de los trabajos de plaza, que se dedicarán en el Carmen a las culturas originarias de América y en San Salvador al medio milenio de Remedios.
Consideradas, junto a los Carnavales de Santiago de Cuba, y las Charangas de Bejucal, como las tres fiestas populares más importantes del país, las Parrandas de Remedios, surgieron en 1820, asociadas en sus inicios, fundamentalmente a la religión.
Más adelante, el convite que llamaba a la Misa de Aguinaldos, se convirtió en una fiesta de pueblo, hasta erigirse en lo que son hoy: un espectáculo cultural que atrae a personas de diferentes latitudes de Cuba y del mundo.
Casi todo en el holgorio es típico de Remedios, desde la música llamada repique, que recorre la ciudad desde meses antes para anunciar el gran día, hasta el baile conocido como el arrollao; símbolo de las más arraigadas tradiciones del territorio.
Remedios cuenta además con un museo alegórico a las celebraciones, que si bien se encuentra en fase de reconstrucción, se prevé su apertura para el 24 de junio de 2015, fecha en que la octava villa arribará a su cumpleaños 500, explicó Fidel Tejeda, director municipal de cultura.
Asomarse por estos días a la zona, constituye una oportunidad para apreciar los preparativos del evento cultural y de pueblo más relevante en el año remediano, un día repleto de júbilo pero, sobre todo, estandarte de las raíces más legítimas de lo nacional, de lo cubano.
Fuente: AIN