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Museo de Céret. 75 años mostrando el arte contemporáneo
25April
Artículos

Museo de Céret. 75 años mostrando el arte contemporáneo

“El arte deriva de un deseo de la persona para comunicarse con otro”

Edvard Munch

   

“No se trata de copiar la naturaleza, se trata de interpretarla”

Henri Matisse.

Museo de Arte Contemporáneo de Céret. Un museo con identidad propia

Con motivo del 75 aniversario del nacimiento del Museo de Arte Contemporáneo de Céret, ciudad francesa cercana a Catalunya, se celebra una exposición que evoca la relación que hubo con diversos artistas de gran renombre que mostraron sus trabajos en algún momento en el museo. Por ello, el director-conservador y comisario de la muestra Jean-Roch Dumont Saint Priest considera que los 75 años de amistad, los artistas y el museo, sirve para revisitar la “historia de relaciones a través de un amplio panorama que presenta más de sesenta obras y documentos, permitiendo comprender mejor la dimensión humana de la colección ceretana”. 

Es cierto que Francia es un país donde se concentran innumerables museos, tanto de arte como de otras disciplinas que ayudan a entender mejor su evolución histórica, pero lo más significativo es que existen espacios que sin ser tan mediáticos fomentan notablemente el conocimiento del pasado. Es el caso de este museo, fundado en 1950 por los artistas Pierre Brune y Franck Burty y que contó con la colaboración de Henri Matisse y Pablo Picasso. Por ello la ciudad es conocida como la “Meca del Cubismo”. Forma parte del selecto grupo de los 100 museos de arte moderno más importantes del estado francés.

 

Henri Matisse. Grande tête de femme. 1945
Henri Matisse. Grande tête de femme. 1945

 

El edificio es obra del arquitecto catalán Jaume Freixa, alumno de Josep Maria Sert, autor de las fundaciones Miró de Barcelona y Maeght de Saint-Paul-de Vence. Su colección permanente refleja la historia artística de la ciudad donde se instalaron o estuvieron temporalmente grandes artistas durante los siglos XX y XXI, entre ellos Picasso, Matisse, Juan Gris, George Bracque, Marc Chagall, Joan Miró, Chaim Soutine, August Herbin, Antoni Tàpies, Claude Viallat y Vincent Bioulès. 

 

Marc Chagall. Le chèvre à l'ombrelle. 1942
Marc Chagall. Le chèvre à l'ombrelle. 1942 

 

Auguste Herbin. Abstraction. 1939
Auguste Herbin. Abstraction. 1939

 

Vincent Bioulès. Saint-françois des Créatures.IV
Vincent Bioulès. Saint-françois des Créatures.IV 

 

Según Carol Delga, presidenta de la región de Occitania/Pirineos-Mediterráneo, el transcurrir del tiempo “no ha alterado la vocación del museo: nutrir la creación, favorecer la transmisión y el compartir, estimular la imaginación, y en definitiva, ofrecer a cada visitante una experiencia única”. De hecho, es lo que cada museo debería ofrecer al público, ya que en realidad es lo que busca o desea quien acude a él.

75 años de amistad, los artistas y el museo

La exposición está cocomisariada por el director del museo Jean-Roch Dumont y la jefa de la colección Aude Marchand. La han dividido en tres apartados: amistades creativas, fundacionales y duraderas que van desde 1950 hasta 2025, “con una perspectiva de aventura constantemente renovada”. Por ello, la idea principal de la muestra es dar a conocer el concepto de confraternidad entre los artistas de vanguardia que encontraron en la capital francesa y catalana un nexo creativo. La presencia en ambas ciudades de dos de los pintores cubistas más relevantes como Braque y Picasso fue fundamental para que otros artistas sintieran un enorme interés en ir a Céret, aunque esta atracción “no se limitaba a la belleza del paisaje o el clima mediterráneo: el contexto transfronterizo, la riqueza cultural y la autenticidad del lugar forjaron una identidad singular. No olvidemos que Céret está situada a sólo 20 kms de la frontera con España.

 

Jean-Roch Dumont, diector del museo
Jean-Roch Dumont, director del museo

 

Es importante resaltar que el museo desde sus inicios ha contado con diversos directores que a la vez eran artistas, por lo que existía una relación muy estrecha con los pintores y escultores que residían o visitaban Céret. El primer conservador del museo fue Pierre Brune, que consiguió aglutinar una colección notable teniendo en cuenta las dimensiones de la ciudad. Las primeras exposiciones que tuvieron lugar se basaron en la abstracción y el arte conceptual. En los años 1993 y 2022 hubo dos reaperturas del museo, hasta llegar a la actualidad siendo “una institución clave del arco mediterráneo, con una gran influencia en el sur de Francia”.

Respecto a las obras que se exhiben merecen destacarse la litografía Vénus et l’Amour (1949) y el grabado Nature norte aux poreaux (1950) de Picasso, pieza dedicada al museo; el dibujo Grande tête de femme (1945) de Matisse, de una belleza y sensualidad exquisita, que tuve la oportunidad de ir contando el número de líneas que aparecen en el rostro de la mujer: en total 15. Hay que tener en cuenta que en 1945 Picasso donó al museo una serie de siete piezas, entre pinturas, grabados y cerámicas- Más tarde, entre 1959 y 1956, amplió la donación con 57 obras más. En cuanto a Matisse, donó trece dibujos fauvistas en 1954.

 

Pablo Picasso. Nature morte aux poireaux. 1950
Pablo Picasso. Nature morte aux poireaux. 1950 

 

Chagall está bien representado con tres obras: el gouache La chèvre à l’ombrelle (1942) y las dos litografías Composition (1971). De Herbin un magnífico gouache abstracto de 1939 que inicia el recorrido de la exposición. El escultor catalán Manolo, que tiene un museo que lleva su nombre en Caldes de Montbui (Barcelona) y gran amigo de Picasso, también figura aquí con la acuarela La chapelle Saint-Paul, jour de fête (1919-1913). Otro fauvista destacado es Albert Marquet, con una magnífica acuarela donde se aprecia una vista del antiguo castillo de Céret realizada en 1940.

El canadiense Jean-Paul Riopelle con el óleo Abstraction (1958) y los catalanes Miró, con el dibujo Personnage Oiseau (1979) y Tàpies, a través del acrílico Socie et jambe (1982), así como el francés Bioulès que después de abandonar el grupo Supports-Surfaces en 1972 se inclinó por la figuración, principalmente centrada en el paisaje, tal como vemos en el acrílico Saint-François, le Cantique des Créatures IV (1980). 

En la misma exposición se presentan dos instalaciones que corresponden al francés Toni Grand y al tarraconense de origen estadounidense Tom Carr. La primera de ellas es Du simple au doublé (1993), compuesta de 17 elementos en forma de nido. Cada cilindro de poliéster reforzado con fibra de vidrio y resina recuerda a las anguilas marinas en suspensión.  Respecto a Carr, Paysage intérieur, permite al espectador reflexionar sobre el paisaje y el entorno natural de Céret a través de un juego de espejos con formas geométricas, elementos que suelen estar presentes en sus esculturas.

 

Toni Grand. nDu simple au doublé. 1993
Toni Grand. nDu simple au doublé. 1993

 

Tom Carr. Paysage intérieur
Tom Carr. Paysage intérieur

 

Una de las obras más sobresalientes que se exhiben de artistas contemporáneos es Avió Céret, de Josep Maria Riera y Aragó, creada expresamente para el museo. Se trata de “una pieza de formas simples y materiales modestos, cargadas de simbolismo: desde cruces catalanas hasta la silueta de un avión despegando”. Otros autores importantes como Jaume Plensa, Susana Solano y Miquel Barceló también están presentes dentro de este ámbito.

 

Josep Riera i Aragó. Avió Céret
Josep Riera i Aragó. Avió Céret

 

Jaume Plensa
Jaume Plensa