Chucho Valdés abre ciclo de jazz en Gran Teatro de La Habana

Por: Alain Valdés Sierra /Foto: Cubadebate

El multipremiado jazzista cubano Chucho Valdés abrió con un concierto este sábado un ciclo dedicado al género que tiene por sede al Gran Teatro de La Habana “Alicia Alonso”, y se extenderá durante dos fines de semana más.

La velada estuvo centrada en piezas de su autoría y otras seleccionadas para rendir homenaje a grandes exponentes de la más universal de las músicas, todas refrescadas por los aires únicos de la improvisación. Así lo advirtió en más de una ocasión durante su actuación: “las puedo interpretar mil veces y nunca saldrán igual”.

Chucho lució, como acostumbra, monumental al piano, sereno, confiado y entusiasta.  Mostró clase desde las notas apasionadas de Caridad Amaro, pieza dedicada a su abuela paterna, concebida para el documental Calle 54, del español Fernando Trueba, hasta las adelantadas de Con poco coco, inspiración de su padre, Bebo Valdés, y considerada cimiento del jazz afrocubano.

El auditorio del Gran Teatro disfrutó también de obras de grandes del jazz como Thelonious Monk  y George Gershwin, del recuerdo por su tierra natal con Son a Quivicán, o de su cubanía genética con las notas de El manisero y Lágrimas negras; la pasión por Chopin, el juego coqueto con Rimski Korsakov y Rachmaninoff, y sus creaciones para el cine con Esteban y el piano, compuesta y ejecutada por el fundador de Irakere para el filme Esteban, debut del director Jonal Cosculluela.

Chucho tiene la capacidad de despertar asombro con la continua ruptura de sus propios moldes, acto irreverente del que siempre se erige monumental, mostrando la sumatoria de todos sus pianos, y dejando entrever lo que está por venir. Ganador de seis premios Grammy y tres Latin Grammy, el cubano mantiene ese espíritu adelantado que lo convirtió en gran jazzista, en el genial músico que es, y ese fue el sabor que dejó entre los asistentes al Gran Teatro de La Habana “Alicia Alonso”.