Placeres de Venecia

La «reina del Adriático», la «serenísima» o la «ciudad de los canales». Así se le conoce también a la hermosa Venecia, reconocida como uno de los polos turísticos más importantes del mundo y, además, por ser un gran centro cultural que aloja eventos de renombre internacional como la Bienal de Arte y de Arquitectura o el Festival de Cine Italiano.

Con una población de cincuenta mil habitantes y visitada cada año por cuarenta millones de turistas, son conocidos los paseos por los canales a bordo de una góndola, tomar un café en la plaza San Marcos, visitar la Basílica del mismo nombre o fotografiarse en el puente Rialto, el más antiguo del Gran Canal.

Pero son muchos otros los atractivos de esta ciudad que inspiró en el renacimiento a pintores como Tiziano Vecellio o Tintoretto. Quizás uno de los mayores placeres en Venecia es descubrirla caminando por sus callejuelas y pasajes.

«Incluso la desorientación es una virtud; perderse en el laberinto de sus paseos, lejos de los sitios más frecuentados, hace descubrir nuevas bellezas e historias. El cuerpo de la ciudad repite y exalta el cuerpo del ciudadano, lo guía, hace resonar sus pasos y voces, lo acompaña por puentes, canales y plazas con una gracia armoniosa, única en el mundo», nos dice Salvatore Settis, arqueólogo e historiador del arte, presidente del consejo científico del museo del Louvre y autor del libro Si muere Venecia.