Santiago de Cuba.- El XXXI Festival Internacional de Coros se realizará aquí en los primeros días de diciembre próximo, cuando se juntarán agrupaciones cubanas y extranjeras, que revitalizarán un género enraizado en la historia musical de esta urbe.
Fuentes de la Empresa de la Música Miguel Matamoros informaron que tomarán parte en el evento colectivos de México, Venezuela, Colombia, Australia, Estados Unidos y Grecia, en una programación que tendrá como sede principal a la Sala de Conciertos Dolores, reconocida como una de las de mejor acústica en Cuba.
Con el auspicio del Maestro Electo Silva, director fundador del orfeón Santiago y Premio Nacional de Música, comenzaron estos encuentros hace más de medio siglo, lapso en el cual se han dado cita en la ciudad cubana coral por excelencia cantores de los cinco continentes.
Una vez más, como ya es tradición, las afinadas y bien acopladas voces saldrán de los recintos para llevar ese arte a escuelas, universidades y otros centros y espacios públicos.
De acuerdo con el reconocido director de orquesta y compositor Roberto Valera, también Premio Nacional de Música, homenajeado en la trigésima edición, los coros y la secular tradición en esa vertiente son uno de los orgullos de la música cubana.
Valera aludió a los orígenes de esas formaciones en esta misma ciudad, a partir de las obras interpretadas siglos atrás bajo la batuta de Esteban Salas en la capilla de la catedral metropolitana, primera en la Isla.
Evocó el músico que su primera pieza de trascendencia popular fue Iré a Santiago, con sus arreglos basados en un poema del español Federico García Lorca, que en las voces del Orfeón Santiago y con la conducción del Maestro Silva ha devenido un himno para esta urbe.
Como fortalezas del movimiento coral cubano, el director orquestal aludió a los buenos y muy profesionales compositores y directores, a los jóvenes egresados de la enseñanza artística, la calidad de los intérpretes y a ese arraigo del canto a pura voz.
Fuente: PL