El alto vuelo de FLYERS

Por Héctor Bosch

Puede que sea el gran formato de las obras, o los nombres de sus creadores, pero lo cierto es que la exposición Flyers, en La Cabaña, despierta el interés por ser un proyecto que ha venido levantando vuelo desde hace ocho años.

En palabras del curador, Andrés D. Abreu, se define como «sublimes arengas lanzadas frente a la limitación consumada del intelecto y la mediatización calculada de la inteligencia hacia lo obvio», lo cual constituye «un proceso de control de la base elemental del imaginario público», que es «el pensar alto en todas las dimensiones y territorios de la existencia».

Añade que Flyers es una acción de CONTEMPORÁNEACUBA, proyecto que viene desarrollándose desde hace ocho años de manera independiente, y que trata de propiciar el intercambio entre artistas cubanos y europeos.

La exhibición reúne jóvenes creadores de la Isla con algunos de sus referentes más cercanos –en este caso Flavio Garciandía, de los años ochenta y Raúl Cordero de los noventa. Exhibida por primera vez en una Bienal, comprende una gran colección de pinturas e incorpora el video performance. Ha sumado además, como curadores invitados, al argentino Silvio de Gracia y a Katarzyna Kozaczyk, de Polonia, quienes fueron convocados a «traer artistas que podían dialogar con la idea de Flyers como volante de pensamiento, de ideas libres, de imaginación individual y del imaginario colectivo, de cómo estas libertades de imaginación son posibles en la contemporaneidad», acotó Abreu.

De ese modo se imbrica sutilmente con el tema de la Bienal, en una relación que, si bien puntual, no está supeditada al evento. Por lo cual resultó conveniente el espacio colateral y las características propias de La Cabaña.

Aunque no tiene propósitos comerciales concretos, CONTEMPORÁNEACUBA ha establecido contactos con centros e instituciones de arte, sobre todo en Italia, y con algunas galerías y espacios de promoción y distribución. Es el caso de Espacio 13, de Katarzyna Kozazcyk, que ha apoyado esta idea para entrar en contacto con el proyecto en Polonia y también en Roma.

Además de la circulación a través de Internet, este año deben contar con un catálogo que entrará en fase de impresión próximamente. «No tenemos institución, ni galería, ni sede fija. Es una plataforma de personas trabajando en función de ese lanzamiento», agregó Andrés D. Abreu.

Asimismo, aseveró no estar cerrados a ningún movimiento o tendencia, «solo estudiamos líneas de creación y decidimos cuál priorizar en determinado momento, y qué artistas promocionar en las exposiciones, que deberán tener una frecuencia bienal».

Así lo atestiguan anteriores ediciones que han incluido instalaciones, fotografía y video, «porque tenían otro carácter», continuó el curador, que considera que han ido perfeccionando su sistema hasta lograr un seguimiento más estructurado, sin dejar de ser desestructurado en su planteamiento de libertad productiva.

«Cada vez indagamos más hondo en las líneas polémicas de los contextos para hacer la selección de la muestra», opinó. Lo cierto es que el vuelo de Flyers alcanza altura en interacción con los sucesos y la temática de la Bienal.

Artistas de Flyers

Alberto Lago, Alejandro Campins, Flavio Garciandía, Francisco Alejandro (el Jim), José Eduardo Yaque, Léster Álvarez, Michel Pérez (El Pollo), Odey Curbelo, Raúl Cordero, Humberto Díaz, Adonis Flores, Marianela Orozco y Carlos Martiel (Cuba)

Deng Dafei (China)

Eva Drangsholt (Noruega)

Guppo Sinestético y Silvia Giambrone (Italia)

Baggenstos-Rudolf (Suiza)

Renny Barrios (Venezuela)

Dorota Buczkowska   Kama Czudowska (Polonia)