Bajo el lema Horizontes Compartidos, la 15 edición de la Bienal de La Habana, con la cual el evento arriba a sus 40 años, se desarrollará del 15 de noviembre de 2024 al 28 de febrero de 2025, convirtiendo a la capital cubana en epicentro del arte contemporáneo, con una participación confirmada de 172 artistas cubanos y 230 extranjeros de diversos continentes.
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La información fue dada en conferencia de prensa realizada este miércoles en el Centro de Prensa Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores, dirigida por Nelson Ramírez de Arellano, director de la Bienal y del Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam; Jorge Fernández, director del Museo Nacional de Bellas Artes, ex director de la Bienal; y Marialis Martínez Juvier, directora de Comunicación de la Bienal.
Creada en 1984, esta cita, organizada por el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam, se ha consolidado como una plaza para el diálogo horizontal entre artistas de Asia, África, Medio Oriente, América Latina, el Caribe y el actualmente denominado Sur Global, segmento llamado a ocupar un espacio mayor en la proyección del evento; de hecho, proceden de este, el 61% de los invitados.
A propósito de su 40 Aniversario, la 15 Bienal de La Habana hará énfasis en los temas, modos, presencias e historias intrínsecas vinculadas a su trayectoria, retrospectiva que permitirá apreciar la evolución del evento y su impacto en el panorama artístico contemporáneo. Estará enfocada en la construcción de redes de conexión y retroalimentación entre los artistas, las comunidades y el público, y su estrategia, al decir de su director, “se basa en la transdisciplinariedad, así como en los fenómenos de colaboración entre artistas y entre los artistas y el público (…) es un proceso socio cultural (…) que mantiene una línea de continuidad”.
Se aspira a que los artistas invitados no solo participen en el evento, sino que creen proyectos de forma conjunta con los habitantes de las comunidades promoviendo la integración del arte con la vida cotidiana.
El Evento Teórico, cuya sede será el Museo Nacional de Bellas Artes, según Fernández, se centrará en temas relevantes sobre el arte contemporáneo, como el vínculo entre arte con la ciencia y la pedagogía; el papel de las bienales en la inclusión social; y la economía sur.
Destacan en la programación: las exposiciones del Museo Nacional de Bellas Artes, en sus dos edificios; la exposición conmemorativa en la Estación Cultural Línea y 18; varias propuestas en colaboración con proyectos socioculturales como Quisicuaba en Los Sitios, Akokán en los Pocitos y otras comunidades como Regla y Casablanca; y el proyecto especial Detrás del Muro, que en esta oportunidad tendrá como título Acera Sur, cuya inauguración ha sido diferida para el 24 de noviembre, debido a los retrasos en las obras por el paso del ciclón.
La programación de la Bienal, que comienza el día 15 en el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam, se desplegará a otros múltiples espacios de la ciudad, tales como el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, el Museo Nacional de Bellas Artes, la Fototeca de Cuba, la Casa de Las Américas, la Estación Cultural Línea y 18, casas, museos y bibliotecas de la Oficina del Historiador de la Ciudad, así como parques, calles y paseos; se suman proyectos que se desarrollan en Matanzas, Pinar del Río y Holguín. Entre las actividades colaterales sobresale un concierto de Raúl Paz e invitados franceses y del patio, en el Anfiteatro de La Habana, dedicado al 505 Aniversario de la Ciudad.
En portada: De izquierda a derecha: Nelson Ramírez de Arellano y Marialis Martínez Juvier, director y directora de Comunicación de la Bienal, respectivamente; y Jorge Fernández, director del Museo Nacional de Bellas Artes.