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María Juncal: entrega sin límites al crecimiento de la danza
22March

María Juncal: entrega sin límites al crecimiento de la danza

Emocionada por el Premio Excelencias 2018 a la genial artista española, por su labor en pos del desarrollo del arte flamenco en Cuba y su vínculo con el proyecto que ha permitido el crecimiento de sus integrantes, Karelia Cadavid no duda en ofrecer pormenores de cómo María Juncal ha despertado pasiones entre quienes aman y defienden el baile típico español a nivel mundial.

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La Juncal está considerada una de las mejores intérpretes de flamenco de la actualidad. Dirige su propia compañía, con la que ha realizado giras por Francia, España, Italia, Holanda, Bélgica, Estados Unidos, Israel, México, Canadá, Alemania, Venezuela, Medio Oriente, China y Japón. Justamente en marzo María Juncal llegó a Cuba para compartir sus conocimientos y mantener sus colaboraciones con nosotros… para siempre. A raíz de este relevante reconocimiento a la Juncal, Karelia Cadavid Álvarez rememora algunos pasajes:

«En marzo de 2009 por primera vez llegué, con dos de las que en ese momento eran profesoras de A Compás Flamenco —proyecto que dirijo—, a unos de las instituciones más emblemáticas y de más historia del flamenco en el mundo: el Centro de Arte Flamenco y Danza Española Amor de Dios, con sede en Madrid, justo en los altos de un peculiar mercado, donde nadie imagina encontrar tanta magia y sobre todo tanta historia. De hecho, es también un museo, porque sus pasillos contienen fotos y posters de los grandes bailaoras y bailaores que en cada época hicieron leyenda. Se muestran trajes de figuras representativas, y sus maestros son toda una tradición cultural en el mundo. Llegar allí ya se convertía en un lujo y un deseo hecho realidad.

«Estábamos ya en la cuna de flamenco, estábamos en donde el arte del flamenco nace y se pule desde la misma raíz. Recuerdo con un cariño inmensos mis días allí, ver ese mural lleno de fotos, horarios y explicaciones para que cada alumno escoja el maestro que quiera… Ahí estaba María Juncal, que había visto bailar en Cuba en el Festival de Ballet del año 2006.

»Joaquín San Juan, director de Amor de Dios —hombre de incalculables valores, de honestidad y sobre todo de una calidad humana y conocimientos sin igual— había otorgado a nuestro proyecto becas de estudio, y dentro de los maestros que escogíamos estaba María Juncal. Eran las dos de la tarde y acababa de empezar su clase. Joaquín la interrumpe para explicarle que éramos de Cuba y que dos personas se incorporarían a su clase de manera gratuita. Sin pensar, María accedió con esa sonrisa que siempre la caracteriza.

»Al otro día de nuestra incorporación al centro y caminando yo por uno de los pasillos de la institución, salió ella del salón 4 y, sin más, me dijo: “Quiero ser parte del proyecto. Quiero ir a Cuba a conocerlo”. Fue un momento que recuerdo con tanto cariño que aún se me aguan los ojos. Comenzaba así un intenso trabajo y un intenso camino a recorrer para el desarrollo del flamenco, no solo en nuestro proyecto, sino en Cuba».

 

Karelia Cadavid, creadora de A Compás Flamenco. Autor: Raúl Pupo
Karelia Cadavid, creadora de A Compás Flamenco. Autor: Raúl Pupo

 

Según nos cuenta Karelia Cadavid, a partir de la primera visita de Juncal a La Habana y de compartir con las niñas y madres de A Compás Flamenco se decidió hacer periódica su presencia en Cuba. Se realizaban ya los Seminarios Flamenco por la Vida, y las niñas, a pesar de su corta edad, comenzaron una preparación basada en una técnica de brazos, de cuerpo y de pie, totalmente depurada, un trabajo que diariamente se realiza en la pequeña sede de A compás flamenco, enclavada en el barrio habanero de Los Sitios. Comenzaba así la preparación de una cantera con lo más auténtico del flamenco, que hacía renacer un género tan querido en Cuba.

«María ya se ocupaba de todo: de ayudarnos en el ir y venir a España, de que el profesorado del proyecto cubano estuviera al menos una vez al año en Amor de Dios con los maestros, que de hecho nos quieren mucho. Con su asesoramiento técnico y metodológico comenzaba a reaparecer el flamenco en un humilde barrio de la Habana, lleno de leyendas y encanto».

María Juncal proviene de una familia de una rica tradición artística. Es sobrina-nieta de Trini Borrull, quien mantuvo estrechos vínculos de cooperación y colaboración con el Ballet Nacional de Cuba. En el año 1986, a raíz del X Festival Internacional de Ballet de la Habana, Alicia Alonso emprende el primer proyecto dedicado a las danzas españolas en Cuba, con el asesoramiento de Trini, quien impartió los primeros cursos a los bailarines cubanos, con la idea de asumir el repertorio español con el máximo de calidad en técnica y coreografía.

Veintitrés años después llega a Cuba María Juncal a trabajar con el Proyecto Sociocultural Comunitario A Compás Flamenco, con el objetivo fundamental de insertar a la sociedad a niñas, niños y jóvenes a través de la danza. Su reto es hacer de ellos la cantera artística fundamental que nutra a las diferentes compañías danzarias que cultiven el género español en Cuba y el mundo.

Gracias a la colaboración siempre presente de María Juncal, el proyecto cubano se ha desarrollado y ha sido merecedor de veintidós premios nacionales y reconocimientos internacionales de instituciones, fundaciones y/o asociaciones ibéricas que se dedican a la danza española y en especial al flamenco en el mundo.

«Siempre la presencia de María con nosotros es de gran significado. Nuestro profesorado trabaja incansablemente para mantener su técnica e intentar que a su regreso le sorprenda la calidad del trabajo que se ha hecho con las niñas y jóvenes. María es un ejemplo como persona, de incalculable abnegación, de estar horas tras horas en un salón trabajando para sacar sus ideas, de siempre mirar adelante. Es un ejemplo como profesional y como ser humano».

María Juncal ha impartido clases, seminarios y conferencias magistrales a más de tres mil niñas, niños y jóvenes que han sido parte de A Compás Flamenco desde 2009 a la fecha y a más de setecientos profesionales de la danza en Cuba.

Ha sido merecedora del Premio Nacional de Danza Flamenca Antonio Gades en Córdoba; el primer Premio de Baile Flamenco y Trofeo Desplante en el XVLI Festival de Cante de las Minas; Premio a la mejor solista flamenca, con la obra El encierro de Ana Frank, en el XV Certamen de Coreografía de Danza Española y Flamenca del Teatro Albéniz en Madrid; Mención de Honor del Gran Teatro de la Habana, por su participación en el XX Festival Internacional de Ballet de la Habana con su espectáculo Destemplao, y ahora el Premio Excelencias del Arte, en Cuba, en 2018.

Su participación en el XXVI Festival Internacional de Ballet de La Habana en el pasado año fue catalogada como excepcional por parte de especialistas y la prensa acreditada. Desde el 2009 todo el trabajo que realiza María Juncal en la Isla cuanta con la aprobación y apoyo de la Oficina Cultural de la Embajada de España en Cuba. Su trabajo es avalado por las más altas instituciones culturales cubanas e internacionales.

En este año, María Juncal cuenta con el apoyo de la Oficina del Historiador de La Habana, que considera la tercera edición del Encuentro Intercontinental de Flamenco, a celebrarse del 11 al 19 de noviembre, como una de las actividades centrales que se realizarán con motivo del aniversario 500 de la Fundación de la ciudad. A dicha ceremonia estarán invitados personalidades y artistas de gran relevancia en el mundo.

«Siempre tengo el propósito de que en España se conozca y se reconozca el trabajo que hace María Juncal aquí —nos dice Karelia Cadavid Álvarez—. A Cuba han venido muchos profesores de flamenco a impartir clases y talleres increíbles que agradecemos con el corazón, pero es algo que dura una semana. Sin embargo, el trabajo de María es permanente, ella está con nosotros siempre, no se va, nos deja tareas para trabajarlas y luego vuelve a revisarlas y a perfeccionarlas, eso es grandioso.

»Tener a una artista tan relevante con nosotros y que no nos deje de la mano es muy, muy importante como proyecto artístico. Es un referente y una guía, una persona fiel a una causa. No todo el mundo quiere, ni viene a un proyecto comunitario a pie de calle a trabajar gratuitamente y a dignificar la danza española y el flamenco de esta manera. Te lo digo porque llevo más de veintidós años trabajando en este giro y casi catorce años ya de fundado A Compás Flamenco.

«Son características muy únicas y propias que se deben saber y premiar, a nivel del Ministerio de Cultura de España, a nivel de instituciones que sepan reconocer el trabajo de María, de esta gran artista que se quita horas de sueño y que es capaz de ajustar su agenda y sus contratos de trabajo para venir a Cuba. Es bueno que no quede en la oscuridad, que se sepa, es nuestra manera de ver y de agradecer lo que ella hace por nosotros, y es una meta que A Compás Flamenco se ha trazado este año.

»Estaremos felices cuando hayamos logrado que María siga siendo reconocida como se merece. Ya tiene su Premio Excelencias, al cual la nominamos, y sentimos un orgullo enorme al saber que le ha sido otorgado junto a Viengsay Valdés, entre otras personalidades. Aprovechamos entonces para dar mil gracias a quienes hicieron posible que María llegara a nosotros cuando más necesitábamos una mano firme que nos guiara.

»Gracias, María, por estar siempre a nuestro lado, por su cariño y amor a las niñas. Gracias por ser un ejemplo de trabajo, abnegación y esfuerzo».

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