ANTONY GORMLEY

MÉXICO: La Universidad Nacional Autónoma de México, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, el Gobierno del Distrito Federal y el banco HSBC presentan, hasta el 31 de enero de 2010, una muestra antológica del artista Antony Gormley (Londres, 1950) en el Antiguo Colegio de San Ildefonso.

La exposición, un recorrido por 25 años de la carrera de este escultor, reconocido como uno de los más importantes de las últimas décadas, ocupará ochos salas, patios y escaleras, con dibujos, litografías, escultura, e instalaciones como Learning to Think (1991), Bodies in Space/Lost Dog (2001), Breathing Room (2006), además de Bread Room y Firmament, creados en esta ciudad en 2008.

El comunicado de prensa puntualiza que, en su trabajo, Gormley explora los modos en los que nos orientamos espacialmente, cómo reaccionamos cuando nos desorientamos, cómo nos relacionamos con la arquitectura y con el entorno construido. Además, penetra en el espacio imaginativo y emocional de nuestro ser interior.

Dentro de la muestra, el espacio es definido y articulado por formas corpóreas solitarias y constelaciones de figuras hechas en acero, hierro fundido o plomo. Estas obras son figurativas y abstractas, reales o imaginarias, así como sólidas y etéreas. Al encontrar estas presencias y ausencias, se nos insta a no ser espectadores pasivos, sino a convertirnos en parte de la obra al ir caminando por ella o a su alrededor, navegando y negociando espacios.

Gormley estudió Historia del Arte y Arqueología en el Trinity College de Cambridge (1968-1971); completó sus estudios en la Slade School of Fine Art y en el Goldsmiths College hasta 1979. Pertenece a un pequeño grupo de escultores que ha reconcebido el lugar del cuerpo humano en el arte contemporáneo.

Ha realizado proyectos de escultura pública como The Angel of the North (1998), en el exterior de Gateshead, o la cripta de la catedral de Winchester. Ha participado en la Bienal de Venecia y en la Documenta 8 de Kassel, y su obra ha sido expuesta individualmente en espacios de prestigio internacional como la Whitechapel Art Gallery, la Serpentine Gallery, la Tate Saint Yves o el White Cube Gallery. Su obra ha sido distinguida con el premio Turner en 1994.

Al describir el proceso mental involucrado en la elaboración de los moldes para sus cajas corpóreas de plomo, Antony Gormley ha dicho: “Acepto convertirme en algo inerte. Acepto entrar en otro nivel de existencia”, y agrega: “Quiero recapturar para la escultura un área de la experiencia humana que ha estado oculta por un tiempo. Tiene que ver con cosas muy simples; cómo se siente mirar hacia afuera y ver, cómo se siente tener frío o miedo, o cómo se siente estar absolutamente quieto y apenas consciente del paso del aire alrededor del cuerpo propio”.

Más información: http://www.sanildefonso.org.mx/; prensa@servidor.unam.mx