Por: Francisco Delgado
Como cada año la fiesta del celuloide latinoamericano vincula sus espacios de diálogo y creación artística al sector industria, escenario ideal para la estimulación e intercambio de proyectos asociados a la producción y distribución del cine en el Continente.
En esta oportunidad serán varios los eventos que acontecerán, entre ellos, el taller de co-producción para películas iberoamericanas bajo la colaboración de la Fundación Autor, ESGAE. Buena parte de sus 15 proyectos “en desarrollo”, giran alrededor de temáticas vinculadas a la existencia individual y colectiva de las naciones, la cultura y los conflictos generacionales.
Desde los tópicos de la producción se brindará una panorámica global de la situación existente en la geografía latinoamericana, y a su vez, hurgando la mirada en la búsqueda de “nuevas alternativas” y “formas de gestión independiente” para la realización de las películas.
Presidida por Lía Rodríguez, el sector industria, figura entre lo más reconocido del certamen por los jóvenes cineastas, en especial, aquellos que desean aprender de lo más novedoso del quehacer cinematográfico.
La colaboración de SUNDANCE en el programa de esta 38 edición del Festival es ya usual, siguiendo sus pautas con los talleres y clases magistrales. Entre lo más significativo destaca, el panel de escritura narrativa, que será impartido por guionistas de vasta experiencia en seriados y filmes para la televisión y el cine, además de un taller para la presentación de proyectos y otro para la música. Este último tendrá como final, un concierto en la sede del Conservatorio de San Felipe de Neris, con la Orquesta de Cámara de la Universidad de las Artes de La Habana y músicos invitados.
Al programa de los talleres asistirá la Academia de Artes Cinematográficos de los Estados Unidos con la participación de diferentes personalidades, entre ellos, Bryan de Palma y Oliver Stone. Será presentado además un documental con imágenes de archivo dedicado a los Beatles.
El patrimonio cultural de las artes audiovisuales y su conservación figuran en el intercambio de experiencias del sector, que ofrecerá detalles de algunos clásicos restaurados y otras ideas sobre la distribución del cine en Colombia.
En la categoría de post-producción que opta por el Coral, están como finalista siete títulos, con la participación de Panamá, nación emergente en la cinematografía de la región.
De modo que el sector Industria sigue la quimera de los más atrevidos fantasmas de la vida. Esos quijotes que deambulan entre la imagen y el sonido como las historias por contar y llevar a puesta en escena en el 38 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.