«Alicia Alonso ya es eterna».
El Mundo
«La Sra Alonso (…) saludó al público desde el escenario, confirmando a sus 94 años que levanta pasiones allí donde va».
Brachtrack
«Una de las grandes virtudes del Ballet Nacional de Cuba (…) es la sangre caliente de sus bailarines, que llenan de carne, y por tanto de vida, a sus personajes».
ABC
Alicia Alonso, uno de los íconos de la danza, recibió el pasado 8 de septiembre la noticia de que el Consejo de Estado de la República de Cuba había acordado incorporar su nombre al del Gran Teatro de La Habana, el coliseo más antiguo de América Latina.
La Habana la vio nacer un 21 de diciembre de 1920, pero quién pudo imaginar en ese momento que conquistaría con su talento y bien hacer a los públicos más diversos, que sería la dueña de los aplausos de este mundo, que Giselle, Odette, Kitri… llegarían hasta nuestros días por el especial acabado de sus obras sin desdeñar sus orígenes, que para suerte de muchos fundaría, en 1948, junto a Alberto y Fernando Alonso el Ballet Nacional de Cuba, y que gracias a su magisterio y voluntad inagotable, convertiría sus sueños en la escuela cubana de ballet. Alicia Alonso es esencia de su pueblo y su cultura, por eso a nadie le extraña que al Gran Teatro de La Habana se le añada su nombre.
En Paseo del Prado 458, frente al Parque Central, el 15 de abril de 1838 abrió sus puertas el Gran Teatro Tacón, que luego fuera Gran Teatro Nacional, Teatro Estrada Palma y Teatro García Lorca, para en 1985 convertirse en Gran Teatro de La Habana; pero nunca dejó de ser el escenario clave para la presentación de grandes figuras del mundo del arte —Fanny Elssler, Ana Pávlova, Sara Bernhardt, Eleonora Duse, Enrico Caruso, Titta Rufo, Victoria de los Ángeles, Teresa Berganza, Marcel Marceau, Serguei Rachmáninov, Arthur Rubinstein, Daniel Barenboim, Pablo Casals, Jascha Heifetz, Andrés Segovia, Ignacio Cervantes, José White, Ernesto Lecuona y Rita Montaner, entre muchísimos otros— que dejaron su impronta en espectadores e historia de la ciudad. Desde 1960 es la sede principal del Ballet Nacional de Cuba y del Festival Internacional de Ballet de La Habana.
Alicia Alonso agradeció el acuerdo del Consejo de Estado a través de las páginas de Arte por Excelencias:
«El Gran Teatro de La Habana es orgullo de los cubanos por su larga historia de servicio a las artes escénicas. Ha acogido grandes celebridades de la danza, la ópera, la música y el teatro. Su arquitectura forma parte del paisaje habanero, su imagen resulta querida y familiar para todos.
»Para mí, como artista, constituye un alto honor que se haya dispuesto unir mi nombre a tan prestigiosa institución. He trabajado muchos años con el Ballet Nacional de Cuba en sus escenarios. Su público, que nos ha recibido durante tantos años con admiración y respeto, es una presencia entrañable para nosotros.
»Mi agradecimiento al Consejo de Estado de Cuba, y a mi pueblo, que ha recibido con alegría la noticia de que ahora existe el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso. En estos momentos vienen a mi memoria los artistas que anteriormente actuaron en este teatro y la generosidad que significa escoger el nombre de uno de ellos para designarlo. Ser yo la escogida es para mí una acción tan bella y generosa, que es algo que me sobrepasa. Solo acierto a decir: ¡Gracias, muchas gracias!».
