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Javier Castro y la poética del tatuaje
15May
Noticias

Javier Castro y la poética del tatuaje

Un bolero velero*

Por Dayara Bernal Roque

 

Eva no es solo un nombre, es símbolo de mujer condenada por su pecado, hermoso producto de una eterna relación amor-odio que sobrevive milenios y de la cual han surgido conmovedoras declaraciones y magistrales obras. Con la serie fotográfica Eva, Javier Castro elige el cuerpo como soporte para el texto, convencido de la carga semántica implícita que se le otorga (…) El artista mantiene una observación un tanto machista sobre este tópico. Los cuerpos hablan solos en las calles mientras los transeúntes contemplamos desde un simple nombre hasta un verso. Suficiente es la visualidad que nos invita –a partir del fragmento– a construirnos una historia. Castro solo expone un detalle, nos insinúa su hallazgo y lo comparte sin mayor información, comprometiéndonos a continuar y enlazar posibles juicios.

 

Formalmente a este joven creador no le han funcionado los tecnicismos, expone una «imagen» lo más verídica posible que se desentiende de un set, de luces artificiales, sonido especializado, etc., en aras de mantener una esencia: la cotidianeidad. Una vez más el sujeto es el centro de la propuesta de Castro, quien establece un diálogo con los implicados y extrae cuanto es posible de ese imaginario (…)

 

En el video La traición de las palabras no hay perjurio si consideramos que cada individuo quiere vivir en el engaño. Más que una sumatoria de diversas partes del cuerpo de mujeres y hombres cubanos que llevan tatuados caracteres chinos con traducciones inconexas, es el exotismo y casi ocultamiento de dichas letras. Es la impunidad del silencio y la oportunidad de camuflar los significados.

 

Lo interesante es lo que dicen –en ambas obras– esas pieles descontextualizadas que forjan un nuevo texto e incluso pautan, por un lado, la pobreza expresiva de estos, y por otro la permanencia de sentimientos y lazos afectivos que impregnan huellas no solo en el espíritu, sino también físicas.

 

*La obra de Javier Castro se exhibe en el Gran Teatro de La Habana hasta el 11 de junio, como parte de la muestra central de la oncena edición de la Bienal.