Las miradas se encandilan ante la belleza de vestidos y cuerpos casi perfectos. Las luces y la música complementan la armonía de un espectáculo subyugante, que se impregnaba cada noche en cientos de pupilas congregadas alrededor de la plataforma. Todos están expectantes, nadie se mueve del lugar, ni siquiera por la fugaz llovizna que todos los años pasa a «saludar».
Las pasarelas al aire libre, a la vista de todos, sin distinciones ni privilegios, dota de un sello único al Festival de la Moda Artesanal «Exhuberarte», de Villa Clara. Durante las jornadas de su décimo segunda edición, el evento volvió a demostrar su poder de convocatoria, tanto para el público como para los diseñadores de todo el país.
Gustos y estilos diversos, colores sobrios e intensos, diseños austeros y atrevidos, moda retro, presente y futurista, confluyen de manera orgánica, viva y natural. Piezas para mujeres mayores de 40 años, ropa veraniega, vestidos que evocan los años 60, estampado textil, guayaberas cubanas, trajes de baño, diseños juveniles, moda urbana… desfilaron ante el público que apreció y aplaudió las obras de los artistas.
La Feria de la Moda Artesanal se ha convertido en una fiesta de todos, en el que el arte, la elegancia y el buen vestir destierra lo banal y lo superfluo. La última jornada se dedicó al aniversario 330 de la villa de Santa Clara, con un cierre de lujo amenizado con danza y buena música.
«Exuberarte» dijo adiós hasta el próximo año 2020, para volver con nuevos diseños para el gusto de todos, y el sano deseo de llenar con belleza el espíritu.
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