La sede del Consejo Nacional de Artes Plásticas (CNAP) acogió la entrega de los Premios Nacionales de Crítica Guy Pérez Cisneros y Curaduría 2018, la víspera del Día de la Cultura Cubana. Oportunidad para que la presidenta del Consejo Nacional de Artes Plásticas, Norma Rodríguez Derivet, intercambiara con los presentes, entre ellos el viceministro Guillermo Solenzal, sobre la urgencia de la crítica en los tiempos actuales.
“La crítica es necesaria en todas las épocas. Es el espejo donde una sociedad se mira y se comprende. La crítica de arte en especial, no solo tiene el deber de orientar estéticamente sino de analizar una obra, teniendo en cuenta comprensión y claridad de la idea, análisis del referente y coherencia del análisis. Desde hace muchos años existe una gran preocupación por rescatar la crítica.
“De alguna manera, creo que todos estamos de acuerdo en que se ha perdido muestra cultura crítica. La década del sesenta fue prolífica. Se polemizaba desde muchísimos suplementos, boletines… Hoy tenemos revistas como Arte cubano; pero falta periodicidad y sistematicidad en nuestras publicaciones”, concluyó la presidenta del CNAP.
El jurado de Crítica estuvo integrado por Antonio Fernández, Jorge Ángel Hernández, director de la revista Arte Cubano y Julia Iglesias Portela, profesora de la Universidad de Las Artes. El Premio en la categoría Ensayo lo obtuvo En deleitosa compañía de Daniel Céspedes Góngora “por el acercamiento a un tema muy abordado desde campos heterogéneos, por la mirada hacia la visión martiana del desnudo y por emprender una travesía en diversos modos de percepción sobre un mismo tema”. Asimismo, otorgaron una Mención especial al trabajo Visado para entrar a la república onolástica de Alain Cabrera Fernández y otro Premio a Otras iluminaciones para Marcelo Pogolotti de Israel Hernández Castellanos.
Por su parte el jurado de Curaduría estuvo integrado por las profesoras Luz Merino Acosta, Hilda María Rodríguez y Silvia Llanes. Se valoraron 15 proyectos curatoriales, ocho en la categoría de exposición colectiva y siete en la de exposición individual. El jurado acordó entregar tres menciones en la categoría de expo colectiva para María Carla Olivera por Humo y Espejos; puesta plural de la colección del CNAP, a Delia María López por Bicentenario de San Alejandro; parte de una investigación de una historia que se corresponde con la fundación de esta importante academia, a Luis Yero por Orígenes; por la connotación de la micro historia de Taguasco, donde se manifiesta la relación entre tradición y contemporaneidad.
En la categoría de exposición colectiva se otorgó un Premio a Milton Raggi y Pavel Martínez por Und nacht wan “por el aprovechamiento de la naturaleza de un taller de creación y reflexión que en esta edición se centró en el universo sensorial como premisa”.
Mientras en exposición individual se entregaron dos menciones, una a Laura Arañó por Jesús de Armas, drama y utopía “por rescatar una figura importante de la plástica cubana, precursor de la generación de la década de 1980”, y otra a Concepción Fontenla por Índice de imágenes José Manuel Mesías, “por poner en valor la mirada diferente que tiene el artista sobre la historia de Cuba, sus actores y los escenarios en los que trascurren los acciones”. El Premio fue para Odalis Borges e Israel Hernández por Martínez Pedro, el agua por todas partes “por descubrir una colección casi desconocida y la reinscripción de un artista significativo de las artes plásticas cubanas”.
Los Premios Nacionales de Crítica Guy Pérez Cisneros y de Curaduría se entregan desde 1999 con el propósito de incentivar la investigación y el ejercicio de la crítica dentro las artes visuales cubanas y, de esta forma, reconocer los más destacados trabajos en este campo.
