No es arriesgado afirmar que no existe un cubano que no conozca La Colmenita, esta agrupación de teatro hecho por y para niños que cumple 30 años de fundada por Carlos Alberto Cremata y que también conocen muchos por el mundo.
Tim Cremata, era aún estudiante de tercer año, en la especialidad de Dirección Teatral del Instituto Superior de Arte de Cuba (ISA) cuando decide crear un grupo que nació el 14 de febrero del año 1990 con solo 14 integrantes, en franca alegoría al amor que es lo que ha repartido desde este nacimiento La Colmenita.
De Cremata hay mucho que hablar; su idea fundacional, iluminada por la ideología martiana, solo merece elogios y agradecimientos; su contribución al desarrollo espiritual de las más jóvenes generaciones de cubanos es incomparable y su intención de multiplicarse en otras colmenas por todo el país y hasta en el exterior, demuestra su afán por compartir estas acciones de formación y su arsenal de sensibilidad y sabiduría.
Ya a finales de la década del 90 La Colmenita multiplica los talleres en el país, los cuales reciben a todos los niños, sin distinción alguna, incluso los discapacitados; un ejemplo de esto lo constituye la creación del Taller –Colmenita de la Escuela Especial para niños sordos e hipoacúsicos “René Vilches”; esa defensa de la diversidad y el respeto a lo diferente que ha sembrado en los niños La Colmenita, es una de sus más nobles y conmovedoras acciones.
Tim Cremata, tenía como uno de sus objetivos cardinales, reforzar el lazo cultural con los habitantes de los barrios desfavorecidos de La Habana y de las demás provincias, particularmente en la zona de la Ciénaga de Zapata, en Matanzas, mediante representaciones de obras clásicas universales de William Shakespeare, Lope de Vega o Tirso de Molina, y es el 2 de abril de 1994, cuando por primera vez, ofrecen una función teatral con Meñique, en el Teatro "Karl Marx", solo con niñas y niños.
Se cuentan colmenitas en los municipios habaneros Plaza, Playa, Marianao, Arroyo Naranjo, Diez de octubre, Boyeros, la Habana Vieja, y en los barrios Cayo Hueso, Alamar y Lawton, entre otros.
También han nacido algunas asociadas a organismos como las Fuerzas Armadas Revolucionarias, el Ministerio de la Construcción, y el Combinado Poligráfico Granma y son de destacar las de las provincias Villa Clara y Sancti Spíritus.
Ya con casa propia, las laboriosas abejitas cubanas logran multiplicar estas acciones formadoras en sus territorios.
Son varias las generaciones de cubanos que han recibido las enseñanzas éticas de los pequeños actores mediante, danzas, poemas, cuentos, canciones y risas, muchas risas, que es la mejor forma de aprender.
La Colmenita posee un amplio repertorio pensado e intencional, constituido por versiones de clásicos infantiles, entre ellos: Ricitos de oro y los tres ositos; Meñique, El gato con botas, La cucarachita Martina, Alicia en el País de las Maravillas, La Muñeca Negra, Blancanieves y los Siete Enanitos, y por piezas creadas originalmente para la agrupación.
La Colmenita ha contribuido no solo a la formación de los niños sino que ha constituido una alternativa otra y válida en la formación especializada de actores y actrices que han seguido el camino de las tablas aunque este no es el objetivo fundamental del grupo.
Pero, los que fueron integrantes del colectivo y luego escogieron otros desempeños profesionales, han quedado marcados por hábitos de educación formal, disciplina, rigor y respeto, efectivos para cualquier profesión en la vida.
No solo en Cuba los niños de Tim son aplaudidos; sus presentaciones en múltiples países como Haití, España, México, Venezuela, Panamá, Bélgica, Alemania y Estados Unidos, entre otros muchos, han constituido, como en la isla, verdaderos fenómenos de público y han conquistado halagadoras críticas que reconocen lo peculiar de un teatro hecho por niños, que sabe cautivar no solo a los más pequeños sino también a los mayores, por su mensaje universal de solidaridad y bondad.
En este cumpleaños hay que felicitar a La Colmenita y a Tim Cremata por su contribución a formar a los ciudadanos de mañana cultivando los más elevados valores humanos mediante la creación artística con un enfoque multidisciplinar; desarrollar el imaginario infantil dando a conocer lo mejor de la literatura universal y folclórica, e integrar aquellos pequeños con necesidades educativas especiales al disfrute del arte, logrando así la unidad en lo diverso, con lo cual entregan también a los adultos herramientas legítimas para la formación de hombres y mujeres, buenos, dignos y patriotas.
Estas razones fueron válidas además para que el Grupo Excelencias decidiera entregarles a estos grandes amigos,el Premio Excelencias Cuba de Arte en el 2017.
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