Fotografiar la naturalidad de un país es contar su historia de forma genuina, pues la lente no miente. Así es como lo entienden en Fundación Casa de México en Madrid cuando exponen las muestras de fotógrafos que han retratado la belleza y realidad de México con sus cámaras en tiempo y espacio.
Dura menos la eternidad. México en la mirada de Rafael Doníz y Pedro Valtierra.
Paisajes, entornos y personas en las fotografías de Pedro Valtierra y Rafael Doníz representan la historia mexicana y ayudan a comprender su realidad a través del tiempo en tan solo un vistazo y una buena reflexión. Fundación Casa México, junto al programa PHoto España, acogen la exposición de estos dos importantes fotógrafos mexicanos Dura menos la eternidad. México en la mirada de Rafael Doníz y Pedro Valtierra.
La exposición durará entre el 3 de julio y el 8 de septiembre, con acceso libre y visitas guiadas gratuitas.
La exhibición fotográfica cuenta con 145 obras de Doníz y Valtierra. Ambos fotógrafos componen la historia viva de México gracias a su aportación documental, reconocida con premios de tal renombre como la Medalla al Mérito Fotográfico (Doníz, 2016) y el Premio Internacional de Periodismo Rey de España (Valtierra, 2018).
A través de la fotografía y el fotoperiodismo han mostrado la costumbre y cultura mexicanas, así como una sociedad cambiante y afectada por la diversas crisis por las que ha pasado el país durante el siglo XX. Exprofeso para la Fundación Casa México, la exposición ha sido comisariada por el investigador, escritor y curador mexicano Héctor Orozco Velázquez.
En un sincretismo apasionado entre el fotoperiodismo de conflicto de Valtierra y la fotografía artística de Doníz, los profesionales se unieron para crear un diálogo cohesionado entre las muy distintas realidades mexicanas.
Las fotografías estarán repartidas en 5 salas en las que el recorrido mostrará al espectador un oscurecimiento de la narrativa a través del cromatismo utilizado con el objetivo de crear un discurso evocado a la memoria.
“Las cosas que van a permanecer más allá de la eternidad son las imágenes que captan los fotógrafos que quieren captar la memoria. Es la conciencia de retratar lo que va a perdurar”, apuntaba el comisario durante la presentación de la exposición.
Valtierra y Doníz han demostrado su admiración mutua por la obra del otro y el trabajo en conjunto. También han agradecido a Orozco por haber confiado en ellos para llenar las salas de la fundación.
El ombligo de la luna, Miguel Soler-Roig
Fundación Casa México acoge a todo aquel que quiera mostrar sus respetos y homenaje al país norteamericano. Así ocurre con Miguel Soler-Roig, un fotógrafo catalán enamorado de México desde su primer viaje en 1986, que presenta en el centro cultural su exposición fotográfica El ombligo de la luna.
Bajo un nombre tan curioso como este, Soler-Roig realiza una comparación entre la forma de los antiguos lagos de México y la silueta de las manchas lunares vistas desde la tierra, en un viaje espiritual que simbiotiza al artista y al espectador en la visión de la naturaleza y la magia del entorno mexicano.
Para este proyecto, el español ha puesto su afecto y memoria a disposición de los ojos de un espectador deseoso de descubrir las maravillas que alberga México. Soler-Roig es reconocido por su trabajo artístico de base conceptual, con una escenografía controlada que crea un discurso narrativo biográfico.
La exposición está siendo exhibida en dos salas desde el 20 de junio hasta el 1 de septiembre. El acceso es libre y la visita guiada gratuita. El proyecto surge de la colaboración entre la Fundación y PHoto España. Ha sido comisariada por la historiadora del arte zaragozana Nerea Ubieto.
En la primera muestra, el público recorrerá una serie de collage sobre la arqueología mexicana previa cordón sanitario por la llegada del turismo masivo. Transita Soler-Roig las ruinas de un recuerdo que hoy ve la luz. En el siguiente núcleo, la estética oscura insta a la meditación, a la “celebración identitaria” de la naturaleza y el punto de unión del espíritu con los astros. Este panorama reúne la realidad física de la escena con la concepción metafísica del autor.
En portada: Rafael Doníz, Héctor Orozco y Pedro Valtierra