“El libro es fuerza, es valor, es poder, es alimento; antorcha del pensamiento y manantial del amor” (Rubén Darío)
El poder de los libros y la lectura es un arma arrojadiza contra la incultura y la ignorancia. En una sociedad llena de estímulos digitales constantes como Tik Tok, Instagram, Youtube, televisión… está ganando la batalla el entretenimiento vacío contra el cultivo de la mente que proporciona la lectura. La población consume estos somníferos para adormecer su pensamiento crítico y llenar sus sensores de dopamina al máximo sin pararse ni un segundo a pensar que, este pasatiempo no les aporta nada más lejos que un instante de felicidad que se esfuma al cerrar la aplicación o apagar el televisor. La lectura, en cambio, aporta beneficios más allá del puro entretenimiento. Aumenta nuestro nivel cultural, nuestra capacidad para tener ideas propias y ser creativo y fomenta las relaciones sociales y personales de los individuos, nombrando solo una pequeña parte de todas sus ventajas.
El Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor fue fijado por la UNESCO en 1995. El 23 de abril, murieron tres grandes de la literatura universal; Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega. Por este motivo se eligió esta fecha para conmemorar a la literatura y su autoría. Sin embargo, poca gente conoce el origen español de la celebración del Día del Libro. El 6 de febrero de 1926, el rey Alfonso XIII aprobó y firmó el Real Decreto por el que se estipulaba que este día se celebraría el 7 de octubre porque por aquel entonces se creía que Cervantes nació en esta fecha. Esta elección causó mucha controversia en la población porque no se sabía con seguridad cuando fue el nacimiento del maestro español de las letras y que, al ser una fiesta callejera, se prestaba más a celebrarse en una época más agradable como la primavera que en el frío y lúgubre otoño.
Cuatro años más tarde de la aprobación del Día Mundial del Libro, en 1930, se estableció la fecha que hoy en día todos asociamos a esta celebración, el 23 de abril. En 1995, el gobierno español presentó ante la UNESCO esta data para establecerla como Día del Libro a nivel internacional.
Un año más tarde, esta organización promovió el nombramiento anual de una ciudad como Capital Mundial del Libro. Madrid tuvo el honor de ser sede en el 2001, este año la Capital Mundial del libro será Estrasburgo.
Realismo mágico iberoamericano
El Realismo Mágico es un movimiento literario que surgió principalmente en Iberoamérica durante el siglo XX caracterizado por la fusión de lo real y la fantasía. Los elementos extraordinarios que coexisten con la vida cotidiana de los personajes son ingredientes propios de este género.
Los máximos exponentes de esta corriente literaria son Gabriel García Márquez con su obra “Cien años de soledad”, uno de los ejemplos más icónicos del género, Isabel Allende, reconocida por “La casa de los espíritus”, que combina realismo y lo mágico para narrar la historia de la familia Trueba y Julio Cortázar, el escritor argentino famoso por su cuento “Casa tomada” que une inventiva y elementos de la vida cotidiana.
«Si le hablas a un hombre en un idioma que entiende, llegas a su cabeza. Si le hablas en un su propio idioma, llegas directo a su corazón» (Nelson Mandela).
Esta premisa ha estado presente en las Naciones Unidas desde su fundación. Los idiomas son una herramienta esencial en la sociedad moderna, sin ellos no seríamos capaces de comunicarnos entre nosotros ni de expresar nuestros deseos ni preocupaciones. La lengua acerca a las personas al permitir esa interacción que nombrábamos en la línea anterior y a la misma vez nos aleja cuando se produce un diálogo entre personas que hablan distinto lenguaje. Diferentes por su parentesco y desiguales en cuanto a su estructura, la lengua española y la inglesa tienen en común el haber sobrepasado el recinto de su tierra natal proyectándose a lo largo de gran parte del globo. Aunque, en realidad, no viajan las lenguas, sino la gente que las habla.
El objetivo de los “Días de las Lenguas Oficiales” de la ONU es homenajear y celebrar por todo lo alto el multilingüismo de las seis lenguas oficiales de la organización (árabe, chino, español, inglés y ruso). Así como crear conciencia sobre la historia, la diversidad cultural e impulsar el uso de estas seis lenguas en todo el mundo.
Tanto el Día de la Lengua Inglesa como el Día de la Lengua Española en la ONU se celebran el 23 de abril. Esta fecha no fue elegida al azar, el destino es caprichoso, y además de hacer que el más prestigioso dramaturgo inglés y el mayor literato español fueran coetáneos, quiso también que compartieran la misma fecha de fallecimiento. De ahí que ambas idiomas compartan la mismo fecha para festejar el Día Mundial de la Lengua Inglesa y la Lengua Española.
En portada: Imagen tomada de https://www.colombiaaprende.edu.co/