Del 30 de marzo al 2 de abril de 2023, Art Paris reúne a 134 galerías de arte moderno y contemporáneo de 25 países. El sector “Promesas”, dedicado a galerías jóvenes con menos de seis años de creadas, arroja una luz prospectiva sobre la vanguardia del arte contemporáneo. Las galerías pueden presentar un máximo de tres artistas y el 45% del costo de participación es cubierto por la feria. Muy internacional y renovado en un 67%, este sector acoge nueve galerías para esta 25ª edición.
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Baert Gallery (Los Ángeles), presenta obras sobre lienzo y dibujos de la noruego-estadounidense Melinda Braathen (1985) y la alemana Sophie Wahlquist (1983), que forman parte de lo más actual de la pintura figurativa: paisajes oníricos y fosforescentes por naturaleza para el primero, evocación de la imaginación de la infancia para el segundo con pinturas gestuales y coloristas de escenas de niños sin cuerpos.
Asimismo, Enari Gallery (Amsterdam) destaca los paisajes de naturaleza semiabstracta del alemán Raffael Bader (1987). Estos, tratados en clave simbolista, responden a los retratos estilizados sobre un fondo de zonas planas de color vivo del danés Thomas Mau (1978), inspirado en la literatura.
El diálogo entre diferentes tradiciones, generaciones y culturas, reúne en Felix Frachon (Bruselas) a dos artistas franceses, Marianne Aublet (1948) y Jimmy Ruf (1980), así como al artista indio Shine Shivan (1981), autor de grandes composiciones en carboncillo, en tinta negra o roja sobre papel tradicional indio, poblado por criaturas de entre dos mundos, cosmonautas con manos con garras, animales y humanos con rasgos en carne viva y arañados.
Anne-Laure Buffard Inc (París) se centra en tres artistas, las hermanas gemelas coreanas Park Chae Dalle y Park Chae Biole (1997), y el artista visual francés Elie Bouisson (1996) que cuestionan nuestra forma de habitar el mundo a través de la revalorización de el gesto cotidiano (tejer para Park Chae Dalle y Park Chae Biole, coser para Elie Bouisson) y la relación con los elementos naturales (hojas de los árboles transformadas en lienzos de colores para los primeros, ensamblaje de materiales orgánicos, textiles y objetos familiares para el segundo).
En la Spaceless Gallery (París, Miami), la inteligencia artificial, las formas orgánicas y la materia son homenajeadas a través de una colaboración entre tres artistas de la escena francesa; la ceramista Olga Sabko (1990), el colectivo aurèce vettier (1990) que aúna poesía e inteligencia artificial y Quentin Derouet (1988) que presenta nuevas obras sobre lienzo realizadas con un único recurso material, una flor, la rosa roja, que creó por hibridación por la calidad de su pigmento.
This Is Not A White Cube (Lisboa, Luanda) destaca a dos artistas portuguesas, Manuela Pimentel (1978) y Vanessa Barragão (1992), que revisitan la herencia ancestral y la artesanía. El primero toma carteles callejeros que ella arma y sobre los que trabaja con acrílico y stencil evocando la tradición de los murales de Azulejos. El segundo crea esculturas textiles a partir de tejidos reciclados que llevan un mensaje ecológico.
La galería Hors-Cadre (París) reúne a tres artistas, Lucile Boiron (1990), Clara Imbert (1994) y Mathieu Merlet Briand (1990) cuya obra cuestiona el mundo visible e invisible, sus fronteras, a través de nuevas proximidades y materialidades. En las instalaciones fotográficas de Lucile Boiron, la piel se libera de sus funciones tradicionales (contener, proteger, delimitar) para mutar en lugar de paso y de múltiples transfiguraciones. La instalación Reliques de Clara Imbert reúne objetos utilizados en rituales sagrados que son como recipientes hacia un mundo invisible. Usando el big data como medio, Mathieu Merlet Briand recicla la Nube, miles de imágenes, videos e información digital. Da forma y sintetiza estos flujos, para crear materializaciones tangibles de ellos en forma de objetos.
La Galería Rebelde (Ciudad de Guatemala) reúne a tres artistas guatemaltecas de diferentes generaciones: Angélica Serech (1982), artista indígena de Comalapa que reinventa la tradición ancestral del tejido maya para crear obras textiles únicas; Clara de Tezanos (1986), conocida por sus objetos sensoriales y esculturas en madera y vidrio que captan la luz y transforman la percepción del espacio; Diana de Solares (1952) que crea estructuras tridimensionales con coloridos patrones abstractos a partir de objetos y materiales encontrados y reciclados.
La galería Gaep (Bucarest) orquesta un cruce de referencias entre dos artistas de distintas generaciones que utilizan la técnica del collage como “acto de resistencia”: el rumano Mircea Stănescu (1954), figura central de la escena rumana de los años 80, y el croata Damir Očko (1977). Para Mircea Stănescu, el collage era el medio más apropiado para traducir bajo un régimen totalitario "un descontento instintivo, el reflejo de un existencialismo en bancarrota", mientras que para Damir Očko es el medio para cuestionar el lenguaje y las representaciones del poder político.
En la web del evento (https://www.artparis.com/fr/artworks), ya puedes consultar las obras presentadas por las galerías y adquirir tus entradas.