Aunque algunos pudieran relacionarlo con el nombre de una pequeña ciudad portuguesa, Amora es un neologismo, femenino y plural, adoptado por la curadora Chrislie Pérez para dar título a la exposición colectiva que, con obras de nueve artistas cubanas contemporáneas, se encuentra abierta al público en Galería Habana.
Sin pretender constituirse en un homenaje explícito al amor, la muestra que en sus orígenes se concibió como una especie de decálogo en el que finalmente no tomó parte el Proyecto Plastic Guajiras, gira en torno a las interpretaciones que de las distintas variantes de este afecto tienen dichas creadoras, a partir de frases pertenecientes a la Biblia o a determinados pensadores que cada una de ellas seleccionó.
Integrantes de la nómina de la institución y artistas invitadas se unen en este proyecto, en el que participan Adislén Reyes (La Habana, 1984); Adriana Arronte (La Habana, 1980); Ariamna Contino (La Habana, 198); Dayana Trigo (La Habana, 1990); Glenda León (La Habana, 1976); Glenda Salazar (Holguín, 1982); Lidzie Alvisa (La Habana, 1969); Mabel Poblet (Cienfuegos, 1986) y Rachel Valdés (La Habana, 1990).
Diversas expresiones de las artes visuales se dan cita en la muestra que abre con la instalación La ascensión, en la que su autora, Ariamna Contino recompone una pieza que dio nombre a la exposición colectiva realizada en abril de 2016 en la galería El Reino de este Mundo.
La técnica del papel calado y el uso de las estadísticas, recurrentes en dicha creadora, se emplean en esta ocasión para reflejar el número de fieles que tienen en el mundo los distintos credos y la cantidad de crímenes de índole religiosa que se registran en el planeta, estos últimos grabados en fragmentos de cristal que han sido colocados al modo de las piedras en las tumbas judías.
El uso de materiales inusuales en el arte, al que se apega Glenda Salazar, está presente en la metáfora que logra con el cabello humano en el dibujo Todo está en tu cabeza (La Tormenta); mientras que de Adislén Reyes se incluyeron dos piezas de su serie Injerto realizadas en la técnica del collage sobre passepartout.
Asimismo, integran la exposición las fotografías de Lidzie Arévalo; un lienzo de gran formato de Rachel Valdés; la performance de Mabel Poblet; Sin duda, una pieza Glenda Salazar perteneciente a la serie Pinturas en silencio de 2015, en la que la artista desarrolló el tema de la escucha; la instalación Trabajos de amor perdidos, de Dayana Trigo y los objetos recontextualizados de Adriana Arronte, quien por estos días mantiene una muestra personal en galería Villa Manuela.
Amora estará abierta al público en Galería Habana hasta el próximo 18 de octubre.