La séptima edición del Concurso de Interpretación César Portillo de la Luz se realizará durante los días 4 y 5 de mayo en el cabaret Pico Blanco del hotel Saint John de la capital cubana, como parte de las celebraciones por el aniversario 500 de San Cristóbal de La Habana. Lo anterior se informó en conferencia de prensa realizada en la sede del evento, presidida por Hugo Oslé, su director artístico, quien dirige también la Academia de Canto Mariana Gonitch, y Luis Carlos Góngora, vicepresidente del Poder Popular Provincial. Se encontraban presentes además la Premio Nacional de Literatura Nancy Morejón y los cantantes Teté García Caturla, Lucía Altieri, Miguel Ángel Céspedes y Johana Simón, todos miembros del jurado.
Veintidós jóvenes cantantes pertenecientes a la Gonitch serán los encargados de defender igual cantidad de temas de reconocidos autores cubanos. Además de los anteriormente mencionados, compondrán el colectivo evaluador, entre otros, los maestros Nelson Díaz, Mercedes Lay y Miguel Moré. La noche de entrega de los premios se realizará una gala homenaje al quinto centenario de la ciudad, en la que intervendrán Miguel Ángel Céspedes, Héctor Téllez, Johana Simón y otros artistas invitados.
El 4 de mayo de 2013 falleció en La Habana el autor de temas emblemáticos como Contigo en la distancia, Tú, mi delirio, Canción de un festival y Realidad y fantasía, quien había nacido en 1922 y tuvo una fecunda vida al servicio de la cultura cubana y de los valores de la cancionística universal. Junto a otros grandes como José Antonio Méndez, Frank Domínguez, Ángel Díaz, Aida Diestro e intérpretes de la talla de Elena Burke, creó un nuevo género musical conocido por filin, que revolucionó el universo sonoro de la Isla e influyó notablemente en compositores e intérpretes del hemisferio.
Desde el propio año de su fallecimiento, el concurso de interpretación que lleva su nombre le rinde homenaje y entrega cada año el Grand Prix César Portillo de la Luz, además de un primero, segundo y tercer premio y otros galardones colaterales. La idea del concurso fue aprobada en vida por el propio De la Luz, quien incluso designó personalmente a los músicos a los que, según su criterio, se les debía dar la responsabilidad de acompañar a los competidores.
El Pico Blanco del hotel Saint John fue durante décadas vórtice de uno de los movimientos culturales más pujantes de la cultura cubana, y punto de afluencia de la vida bohemia de las noches habaneras.
«Aquí nació y creció la más linda canción cubana, aquí, en el Pico —declaró Hugo Oslé en la conferencia de prensa—. César, José Antonio, Marta, Elena, Omara, Moraima fueron vanguardias del sentimiento nacionalista y estética musical interpretativa que ha marcado la diferencia hasta nuestros días. Agradecimientos especiales al Ministerio del Turismo, a su grupo hotelero Gran Caribe, a los entusiastas directivos del complejo hotelero Vedado-Saint John por hacer justicia y devolverle al maestro César lo que realmente le pertenece». Y concluyó: «Desde el olimpo de los dioses eternos de la patria, al maestro César Portillo de la Luz agradeceremos infinitamente lo que hoy le tributamos».