Por Elizabeth Bello Expósito (Especial para Arte por Excelencias)
Con el desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y la aparición de Internet, la tradición de ir al cine se ha perdido. Las personas han dejado de ir a la sala de proyecciones: pueden tener los filmes y ver en casa.
En Cuba se han creado disímiles eventos que se enfocan en revitalizar esta tradición y reúnen miles de personas en torno al cine. Uno de ellos es el Festival Internacional de Cine de Gibara (FIC Gibara), antes conocido como Cine Pobre, que cuenta a su favor con uno de los pocos cines en funcionamiento de la provincia de Holguín.
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De ahí que, en esta ocasión, para garantizar la afluencia de público al cine Jiba se ha concebido una heterogea muestra con un amplio espectro, que va desde el cine alternativo y sagaz, al cortometraje y largo de ficción complejos, el documental y la animación; pero sobre todo audiovisuales con alto rigor estético-artístico y calidad, puntualizan los organizadores del certamen.
El fomento de audiovisuales constituye prioridad de los festivales de cine en Cuba y en especial del FIC Gibara, que más que plataforma para la exhibición y promoción de películas finalizadas pretende apoyar la gestión fílmica desde las etapas iniciales o bien en otros estadios de la producción y la posproducción.
Es por ello que, además, en esta ocasión, catorce producciones y coproducciones de Canadá, Argentina, México, Colombia, Cuba, Brasil, España, y Croacia postulan por el premio Humberto Solás al cine en construcción. Se agrega además en esta XIV edición un segundo galardón, especializado en guiones inéditos, que cuenta con diez aspirantes, todos de Cuba.
Alcanzar un agasajo no será tarea fácil para las obras en concurso, que evaluará un jurado de prestigio, compuesto por importantes personalidades y especialistas del cine y la cultura a nivel nacional e internacional. Entre ellos Félix Viscarret, guionista y director español; Laurie Ann Schag, directora y productora de Estados Unidos, Stephen Bayly, productor y director de cine del Reino Unido, entre otros.
Al jurado especializado se suman profesionales de la prensa cubana.
Es así como el Festival de Cine de Gibara se transforma de plataforma de difusión en un certamen que asegura el futuro de la cinematografía, desde una esencia que promulga el fomento del cine alterno a los grandes mercados de producción, la industria propiamente dicha y las instituciones.
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