Por: Sussette Peralta Cassorla
Una joven y talentosa cantante presentó este viernes ante la prensa especializada sus cartas credenciales de la mano de la EGREM. Dame Salsa lleva por título la primera creación fonográfica de Rosalía Leyva Saiz -Rosaliz-.
Producido por Roniel Alfonso, consagrado productor y orquestador, Dame Salsa ofrece una refrescante propuesta, que además de la salsa, aborda la balada y la bachata, aunque también, de repente en los coros y solos de orquesta pueden escaparse acordes de cha- chá- chá, y otros ritmos. Es de resaltar los arreglos musicales contemporáneos donde destacan los metales y la percusión.
Músicos de la talla de Eduardo Sandoval, Keissel Jiménez y Alejandro Falcón aportaron interpretaciones magistrales al fonograma. Destacan también en este disco la colaboración de dos intérpretes veteranos Will Campa y Alain Daniel. Por su parte, las composiciones llevan la firma de Roniel Alfonso, Osmany Espinosa y la propia Rosalía Leyva Saíz; aspecto relevante, pues las letras a pesar de hablar del amor y el desamor o temas cotidianos, no agreden como suele suceder últimamente en la Timba o el Reguetón.
Probablemente a algunos les parezca que Dame Salsa tiene matices de sonoridades foráneas tropicales como la Salsa que se hace en Puerto Rico y hasta adquieran una posición escéptica. Pero es esa osadía juvenil de sus productores lo que la da mérito a este disco que está hecho para el bailar. Armonías contemporáneas sin apartarse de la célula rítmica cubana, donde sus metales, percusión y la interpretación vocal beben de fuentes nacionales e internacionales, pero siempre caribeñas. Es por tanto, una propuesta para el público bailador de distintas generaciones, para quienes en sus años mozos bailaron una buena rueda de casino y para quienes comienzan a bailar y prefieren hacerlo sin chabacanerías ni obscenidades.
Rosaliz es una intérprete versátil, capaz de interpretar distintos géneros musicales y así lo demuestra en Dame Salsa. El inicio de su carrera como cantante profesional lo marcó un concurso de talento organizado por el Programa “Palmas y Cañas” y el maestro José Luis Cortés, quien partió del excelente desempeño de Rosaliz en el concurso para integrarla a su Academia de Canto. En 2012 fue avalada por el Instituto Cubano de la Música como cantante profesional. A partir de ese momento emprendió un camino de arduo trabajo donde hace poco más de un año logró conformar su orquesta y en aproximadamente seis meses licenciar su primer fonograma con la EGREM. Por supuesto, Rosaliz tiene muchas aspiraciones para su carrera musical y tiene buenos pilares para apoyarla, su mamá y su esposo Randy Montero Granado, quien además es el Director Musical de la orquesta. Sus ídolos en la música son Haila, Celeste Mendoza y La India, de las que Rosaliz admira su temperamento y voluntad para crecer y triunfar.
Es por eso que Arte por Excelencias augura para Rosaliz un buen futuro, en un mundo musical de hombres en su mayoría, donde las mujeres que llegan, se mantienen y brillan. Démosle entonces confianza y una buena patadita de la suerte.
