ZACATLÁN: Jaguares, conejos, venados, abejas, casas con techumbre de paja, personajes españoles e indígenas en actividades cotidianas son fragmentos de la pintura mural hallada de manera fortuita durante el proceso de restauración de uno de los conjuntos conventuales franciscanos más importantes de la América virreinal, ubicado en este municipio.
Zacatlán, voz náhuatl que significa “lugar donde abunda el zacate”, fue fundada por mandato de Hernán Cortés en 1522 en las cercanías de un asentamiento prehispánico originalmente habitado por otomíes y posteriormente por toltecas y chichimecas.
Tan sólo dos años después de la creación de la ciudad, en la Sierra Norte de Puebla, se comenzaron los trabajos para la construcción de lo que sería el convento más antiguo del estado de Puebla y el primer templo de planta basilical en México.
Con una inversión de 16 millones de pesos, aportados por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), por conducto de la Dirección de Sitios y Monumentos, la restauración se realizó en tiempo récord de siete meses, pese a la monumentalidad del histórico inmueble. Se logró descubrir únicamente 10 por ciento de la pintura mural del templo dedicado a San Francisco de Asís.
El equipo que trabajó para que la obra quedara concluida antes del cierre de 2009, estuvo integrado por unos 150 trabajadores, entre especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la Secretaría de Cultura local y estudiantes del Instituto de Artes Visuales del Estado.
Fuente: La Jornada