WASHINGTON: La Colección Phillips propone una retrospectiva al trabajo abstracto de la artista Georgia O’Keeffe (1887-1986).
A mediados de los años 1920, O’Keeffe, natural de Wisconsin, abandonó la ambigüedad de la abstracción pese al éxito ganado.
Casi olvidada su vertiente abstraccionista ante su arte figurativo posterior, la institución recupera ahora el quehacer de esta pintora clave del siglo XX, con la exposición de más de 100 óleos, dibujos y acuarelas.
O’Keeffe es conocida por sus flores gigantes, por los colores rotundos de sus paisajes del oeste americano y sus rascacielos neoyorquinos.
Acerca del abstraccionismo ha dicho: “Una pintura de un objeto no es buena a menos que lo sea en el sentido abstracto. Una colina o un árbol no pueden ser un buen cuadro simplemente porque son una colina o un árbol. La combinación de sus líneas y colores es lo que dice algo”.